sábado, 31 de marzo de 2012

Muerte de una heroína roja

He acabado de leer  Muerte de una heroína roja de Qiu Xiaolong.

Fue galardonada con el Premio Anthony a la mejor primera novela y finalista del prestigioso Premio Edgar.

Esta es la sinopsis que la propia editorial hace de la novela:
“Shanghai, 1990, el asesinato de la joven Guan «Hong Ying», una celebridad política y estandarte nacional, se convierte en un caso delicado un año después de los acontecimientos de la Plaza Tiananmen. El recién ascendido Inspector Jefe Chen Cao se muestra poco convencido por la máscara de perfección de la heroína roja, entregada a la causa del Partido, sin amigos ni amante.
Es una radiografía sutil de la China de la transición, captada a través de una multitud de historias particulares y una apasionante inmersión en su historia, cultura, tradición poética y gastronómica. Una magnífica iniciación a la China de hoy.

Si hablo aquí de “Muerte de..” es porque se trata de novela negra china. ¿Algo exótico? Diferente sí que es.
Creo que respecto a la novela negra “occidental” tiene tres diferencias, que no la hacen desmerecer:
Por un lado hay una gran profusión de poesía china antigua, de refranes de la sabiduría popular o del confucianismo, hasta el punto de el mismo inspector jefe Chen Cao es un poeta.
Además, como buena novela negra, analiza una sociedad que nos resulta, cuando menos, sorprendente. Tenía preparadas unas citas sobre como es su vivienda, su comida,… pero las voy a olvidar. Ahora bien, sus costumbres, su forma de relacionarse con el trabajo o la política, sus “pisos”, sus “banquetes”, cómo entienden el triunfo social o el bienestar económico, en definitiva su cultura es muy diferente a la nuestra. Y aquí no hay teorías sino análisis descriptivo de cómo son las cosas a diario.
Por último, la novela negra no suele ser histórica. Esta tiene algo de eso. Está escrita el año 2000 (editada en castellano el 2006), pero trata de 1990. Demasiados años, como para querer ser actual.
Dicho todo esto retomo mi interés para hablaros de la novela. Es que es una novela “fácil”, agradable de leer, que se lee de un tirón o de muchos ratos sueltos, porque su trama no es nada complicada y, en su conjunto, es una novela muy apta para estas vacaciones (o para el verano).
Como además está en edición de bolsillo, os podéis hacer con ella por 9 euretes de nada. (Pasaros al e-book,  antiguos).
Que esta semana sirva de descanso o de ese cansancio que merece la pena, no como el del trabajo.